martes, marzo 19, 2024
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La Raya e Independencia, en El Espino, Xona, con tristes imágenes por inundaciones

José Ángel Gutiérrez.

Habitantes protegen sus hogares con sacos de arena, casas lucen con agua, un tractor bombea líquido con apremio y un adulto mayor atraviesa un patio encharcado en silla de ruedas.

Tras sufrir las afectaciones más notorias por inundaciones en Xonacatlán, habitantes de barrio El Espino, perteneciente a la cabecera municipal, arreglan la calle Independencia con sacos de arena y bombean agua de regreso al río Lerma, no sin antes dejar lamentables imágenes.

Aunque hay más calles con agua acumulada, Independencia es la notable porque ahí se ubican casas encharcadas; así como la escena de un señor en silla de ruedas que debe atravesar su patio inundado, sin descartar un tractor bombeando agua con apremio en La Raya.

Mientras comparte una imagen de su autoría, el ciudadano Marcelino Galicia Becerril lamenta ver cómo las autoridades “abandonan a su pueblo”, porque en El Espino van casi 15 días en cuyo transcurso “el uso de botas de hule es parte de la vida cotidiana”, refiere.

Se puede apreciar al señor Rey Hernández, quien, debido a la falta de movilidad y pérdida de la vista por enfermedad, diariamente es desplazado por su señora madre en silla de ruedas, a través de un patio hacia la calle de terracería donde toma los rayos del sol.

Y justo cuando pasaron autoridades del municipio nadie verificó las condiciones en que está esa familia, que pide camiones de tierra para proteger su humilde hogar.

Entre ayer y hoy había personas llenando costales con arena para tratar de formar barricadas en calle Independencia, donde corre de manera paralela la contra zanja de La Raya, en el paraje del mismo nombre, límite con Otzolotepec y El Espino Peralta del municipio de Lerma.

“Cada año tenemos el mismo problema. Nosotros estamos prestos a tratar de solucionarlo, sin embargo, en esta ocasión nos volvió a subir el nivel del agua, en virtud de que sólo tenemos una bomba desde la semana pasada.”, expuso Miguel Ángel Portillo, comisariado ejidal.

Es una bomba de 10 pulgadas con gran capacidad de desagüe, aunque las precipitaciones pluviales le superan en demasía. Trabaja accionada por un tractor y bombea el agua sobrante al río Lerma tras la compuerta de la contra zanja, que evita el regreso parcial hacia El Espino.

Con una lluvia fuerte hay posibilidades de nuevas inundaciones, en cerca de 180 viviendas afincadas en la zona, donde el año pasado se tendió tierra-greña de entre 10 y 15 camiones con costo de unos mil 300 pesos por cada automotor.

En La Raya hay dificultad, pues se quitan grandes cantidades de agua durante el día, empero en la noche el líquido regresa en mayores proporciones.

La Comisión del Agua del Estado de México (CAEM), así como su par nacional Conagua, casi no monitorean la zona. La CAEM envío una bomba, pero sin personal operario, por ello los pobladores piden apoyo al gobierno municipal y estatal con costales y arena, para seguir con los trabajos con sus propias manos.

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