Espejismos

*Aarón Dávila*

Tengo por cierto que la humanidad ha recorrido un largo camino para llegar hasta el día de hoy, aunque no es necesario un recorrido tan largo para entender las necesidades y errores de la misma.

Decía George Bernard Shaw (1856-1950) Escritor irlandés que:

“La humanidad se cansa pronto de todo, sobre todo de lo que más disfruta.”

“Soy hombre, y, por lo tanto, nada que sea humano me resulta extraño.” Terencio (195 AC-159 AC) Autor cómico latino.

Los seres humanos perseguimos sueños diversos y muchos de ellos, son en pos de la gloria y el poder, mientras que otros más, tan sólo esperan cenar y dormir bien la noche siguiente, por supuesto que, hay de sueños a sueños y ojalá y cada uno de ellos se cumpliera y por otra parte que bueno que no es así.

El rey Salomón por su parte decía que:

“El que trabaja tiene dulces sueños, aun cuando coma mucho o coma poco…”

En ciertas ocasiones, la vida parece transcurrir a través de espejismos, entre promesas de bien que nunca llegan y acciones de mal que nos acorralan y hacer sentir extraviados.

Hay días que se perciben largos e interminables y por otra parte transitamos noches que pronto terminan.

Tenemos responsabilidades y asuntos por resolver que de facto dejan caer sobre nuestros hombros, cargas que en ocasiones resultan insostenibles o difíciles de llevar, pero la humanidad resiste y ha resistido tanto y más cómo se le presente, porque es resiliente y es además parte de un plan eterno de esperanza y consuelo.

Se han hecho pactos que demandan cumplimiento y tal vez sea tiempo de tomar el lugar que nos corresponde en esta historia tan contada.

Cosechamos lo que sembramos, ni más ni menos, pero lo que preocupa no es la cosecha, sino más bien lo que se siembra, hay semillas de bien y semillas de mal unas dan hermosos frutos para vida y las otras erosionan y desgarran la misma naturaleza humana.

Ciertos valores jamás se olvidan, todo trascienden, pero otros más nunca maduran y fácilmente de las manos escapan.

Los valores nos permiten ver lo que otros ya no ven. Sentir lo que otros ya no perciben.

Amar lo que se ha dejado de amar.

Los valores son principios que buscan regir la vida de los seres humanos, la moral traza el camino a seguir en cuanto a lo bueno o correcto, o a lo que es malo o incorrecto y la ética por su parte, juzga las acciones de la moral, mediante declaraciones éticas en forma de sentencias, que aclaran el actuar de la moral y los valores y es así, como el pleno de la vida debería de ser.

Somos actores de esta trama, llevemos a buen final esta historia, no a lo efímero, si a lo eterno, provisión del mismo creador para lo mejor de su creación, la humanidad.

“Por lo demás, hermanos, piensen en todo lo que es verdadero, en todo lo honesto, en todo lo justo, en todo lo puro, en todo lo amable, en todo lo que es digno de alabanza; si hay en ello alguna virtud, si hay algo que admirar, piensen en ello.” Apóstol Pablo.

Si hay algo bueno en que pensar, entonces pensemos en ello, no busquemos más destrucción a través de acciones culposas, generemos acciones de bien que permitan que en lugar de espejismos vivamos con claridad esta vida que nos tocó vivir.

Acciones de paz generan paz, acciones de amor, generan amor, acciones de bien, producen confianza y fortalecen al débil de corazón.