Infórmate por qué el SAT puede amonestarte por transferencia electrónica
*Redacción Diario Evolución*
Con el avance de la tecnología y la implementación de las apps bancarias para realizar todo tipo de movimientos desde la comodidad del celular, ya se hacen transferencias bancarias de una cuenta a otra en menos de un minuto. Debido a que es uno de los movimientos que se hacen con más frecuencia entre mexicanos, una de las preguntas más comunes es sí podría cobrarse algún tipo de impuesto.
A través del Sistema de Pagos Electrónicos Interbancarios (SPEI) ya se permite realizar pagos electrónicos de manera instantánea entre cuentas bancarias, con lo que ya puede evitarse las largas filas que antes se realizaban en los bancos para hacer un depósito o transferencia, en sí, por estos movimientos no se pagan impuestos.
Sin embargo, se sabe que el Sistema de Administración Tributaria (SAT) vigila las transferencias bancarias para asegurarse de que no se esté haciendo evasión fiscal, por ello, vigila todo el dinero que entra y sale de las cuentas de los contribuyentes independientemente si son en moneda nacional o extranjera.
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Las instituciones bancarias están obligadas a reportar al SAT los depósitos en efectivo y las transferencias electrónicas SPEI iguales o superiores a 15 mil pesos en un día. Si bien al hacer un depósito grande no implica que uno esté evadiendo impuestos, hay ciertas actividades que pueden llamar la atención del SAT, como declarar que se tiene un ingreso mensual de diez mil pesos y de repente se tenga un depósito en la cuenta de 100 mil pesos, movimiento superior a lo declarado.
Por ello es esencial que los contribuyentes declaren cualquier ingreso adicional o inesperado que reciban, incluso si proviene de un depósito grande en efectivo, puesto que podría alertar al SAT. Es recomendable llevar un control ordenado de las transacciones que se realizan y asegurarse que sean consistentes con las declaraciones de impuestos.
En caso de ser una persona con actividad comercial y continuamente se reciben pagos por transferencia o depósitos en efectivo, se recomienda lo siguiente para evitar cualquier malentendido con el SAT: llevar un registro detallado de ingresos y gastos; declarar todos los ingresos; guardar los comprobantes fiscales y solicitar asesoría fiscal.
A.C.
