El gris informe de Alfredo del Mazo

**Morena analizará la relección**

**Parque La Pilita, hundirá más a Gabriela Gamboa**

En el Segundo Informe de Alfredo del Mazo, no hubo sorpresas, nada que presumir, ningún anuncio espectacular, todo lo que ahí se dijo, La Mayoría Silenciosa lo tiene presente, pocos resultados, mucha inseguridad, poca obra y grandes dudas acerca de su compromiso con el Estado de México. La percepción de la gente es que tiene un gobernante que está ausente, no lo sienten cercano, no lo ven preocupado por los problemas.

Del Mazo perdió una oportunidad inmejorable para relanzar su gobierno, arropado por la clase política de su partido debió prometer nuevas cosas, ampliar sus programas, anunciar obras de impacto, pero todo quedó en aceptar que la seguridad es todo un desafío, aquella que prometió acabar en 3 meses de manera demagógica.

Sus logros y su administración al igual que su informe son grises, su impacto ni siquiera se percibe mediático, no tiene fuerza ni en los hechos, ni en la publicidad ni en las palabras. Su programa insignia la Tarjeta Rosa, apenas y llegó a 204 mil mujeres, tomando en cuenta que hay más de 7 millones de féminas en el estado, apenas y es un bálsamo para apoyar ese universo. Gasta más en publicidad, en transporte y playeras que en beneficiar a las mujeres.

También ha desaprovechado su oportunidad para subsanar la lejanía de la federación con sectores como el de los empresarios o el sector de la construcción, quienes ante la nula inversión federal se han visto paralizados y, han afectado la creación de empleos y el crecimiento de la economía; aquí el crecimiento es nulo, la inversión ha dejado de fluir y no ha hecho grandes cosas para tratar de atraer capitales.

Se le ve tranquilo con la presencia y los halagos de los principales personajes de la Cuarta Transformación, le falta ambición o al menos no manifiesta algún deseo mayor que ya vive, gobernar a los mexiquenses. Que diferencia con Peña, que dejó en claro desde los primeros meses su deseo de ser presidente; que diferencia con Eruviel Ávila, que operó extraordinariamente de manera política para ser ungido gobernador y después para buscar fuero a través del Senado.

Parece muy malo tener un gobernador alejado de los reflectores, sin ambiciones políticas; porque eso se nota en su falta de trabajo, en su querer solucionar problemas, en estar al pendiente de La Mayoría Silenciosa, incluso aunque sus resultados no sean buenos, en su intento por hacer algo más por sus gobernados.

Esperemos que el próximo año sea diferente, que cambie el rumbo, no sólo de sus aspiraciones, sino también del Estado de México, para bien de todos, mientras todo sigue gris.

En Morena

Si bien es cierto que los estatutos de Morena no permiten la reelección y eso ha generado inconformidad, sobre todo en los cuadros que arribaron de otros partidos políticos, fuentes allegadas a La Mayoría Silenciosa aseguran que la próxima dirigencia nacional, analizará de manera profunda darle una revolcada a los estatutos y permitir la reelección de alcaldes y diputados.

La intención no es proteger a los arribistas de otros partidos políticos, la intención es generar confianza entre sus cuadros y dar la oportunidad a los buenos gobiernos de continuar al frente.

En Metepec

La Mayoría Silenciosa en Metepec pocas veces sale a la calle, pocas veces se manifiesta, pocas veces levanta la voz, pero cuando lo ha hecho ha sido para defender sus áreas verdes, ya lo hizo en Sedagro y ahora lo hace con el parque La Pilita, porque la alcaldesa, Gabriela Gamboa, ha considerado la posibilidad de donar una parte a la Guardia Nacional para una base.

La presidente no saldrá bien librada de ésta, por un lado, los vecinos están en contra y por otro, si no logra la base quedará mal con los altos mandos de Morena, al no saber operar el tema. Gamboa no es buena para operar, políticamente hablando, además tiene en contra a los medios de comunicación, es decir, el tema lo perderá, sin duda.