Adulto Mayor vive en condiciones desfavorables: Especialista
*Melchor García*
En el Estado de México habitan alrededor de un millón 800 mil personas de la tercera edad, sector de la población que enfrenta con mayor fuerza los males endémicos de la salud mexicana como lo son diabetes, enfermedades del corazón, del hígado, cerebrovasculares y los pulmones, todas relacionadas con los malos estilos de vida de la población, pero que se presentan principalmente en personas de los 50 a los 80 años de edad.
En el marco del Día del Abuelo que se festeja este miércoles, especialistas en gerontología advierten la condición en la que vive este sector, donde prevalece la pobreza patrimonial y alimentaria, pues se estima que 45% de los adultos mayores, de 50 años o más, siguen haciendo una actividad económica que les permita subsistir, principalmente dentro de la economía informal o el subempleo.
“Nosotros buscamos un adulto mayor y dicen todos que va ser muy lindo, que va ser muy alegre y en un entorno muy favorable, pero cuando buscamos un adulto mayor lo encontramos en condiciones desfavorables entre ello la pobreza, pueden caerse, tener ulceras por presión, es una de las principales enfermedades.”, nos comentó Liseth Mondragón, gerontóloga.
Actualmente la demencia senil, el Alzheimer, el desgaste de las habilidades cognitivas y la edad, son los principales males de la salud mental que también afectan a este sector y que su vez pueden derivar en depresión por las afectaciones en su cuerpo, así como la pérdida de sus seres queridos y amigos.
“Si bien, sabemos los síndromes geriátricos son las aquellos más comunes para el adulto mayor entre ellos también encontramos la depresión, entonces a veces no solamente podemos decir es que tiene depresión porque ya está viejito, puede ser que sea por un duelo o esté pasando por un proceso de duelo en el que debemos prestar atención a eso.”, dijo la experta.
Cabe resaltar que en México la esperanza de vida ha aumentado considerablemente y hasta el año 2016 aumentó a los 75.2 años, realidad que ascendió de manera conjunta con el abandono, las agresiones físicas, verbales, psicológicas y hasta robo patrimonial que padecen las personas de la tercera edad.