¿Cansancio? La fe nunca descansa para los ciclistas
*Melchor García*
A la pregunta ¿cuál es el motivo para salir a pedalear hasta la Basílica de Guadalupe? Eduardo Librado Rosales, simplemente responde “la fe”.
Ese sentimiento es el que lleva, desde este miércoles, al menos a cinco mil ciclistas mexiquenses a recorrer desde sus comunidades de origen hasta la Ciudad de México, a visitar a la virgen de Guadalupe; esto como parte de la edición número 86 de la peregrinación de la Arquidiócesis de Toluca hasta el principal centro Mariano del país.
“De hecho sí es mi primera vez en la bici. Me habían invitado anteriormente compañeros, conocidos, amigos… esta vez dije que sí quiero conocer a la virgen”, dice.
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Ciclista desde pequeño, indicó que desde semanas previas se preparó con sus hermanos y amigos para tener la condición suficiente para sortear la prueba del camino, no sufrir de más y estar entregado, dice.
“Salimos a rodar en las últimas semanas media hora, 40 minutos, para tener condición. Para mí es la primera vez que vengo en bici, había ido en carro, pero esta es la primera vez en la bici”.
Detrás de los ciclistas, al igual que de los peregrinos, cada uno esconde un motivo para llevar a cabo esta manda. Muchos buscan salud, trabajo o un milagro pero otros los más afortunados, como en su caso, son movidos solo por el amor.
“¿Un motivo? No tengo para ir…tengo salud y trabajo simplemente quiero verla y darle gracias ese es el motivo”.
La primera cuesta hacia la Ciudad de México, reconoce, será la más complicada pero no habrá cansancio porque los mueve una fe, que asegura, es más grande que todo.
“Con la fe uno puede todo” declaró.
Eduardo es uno de los ciclistas que, con un contingente de la Parroquia de Santiago Temoaya, forma parte de esta peregrinación 2024 hacia la Basílica de Guadalupe.
