Ceden policías al lado obscuro
*Melchor García*
Los delitos de extorsión y secuestro encabezan los hechos criminales por los que policías o ex uniformados son aprendidos y sometidos a la justicia; la rapidez para obtener ganancias y el conocimiento del manejo y protocolos de actuación son algunos de los motivos que los lleva a ceder a los placeres de la criminalidad.
De acuerdo con el coordinador de Combate al Secuestro, Rodrigo Archundia Barrientos, los policías que se convierten en delincuentes escalan en el crimen iniciando con delitos robo, pero se mueven a la extorsión con el paso del tiempo y terminan cometiendo secuestros.
Resalta que, siendo servidores públicos, o exservidores públicos, en casos de secuestro pueden alcanzar una pena de hasta 70 años de prisión que se agrava con dos terceras partes más por ser servidores públicos o exservidores públicos de una corporación policiaca.
En este sentido, refiere que los elementos policiacos se ven involucradas con las bandas de plagiarios, algunos son líderes, mientras que otros dan protección, asesoramiento e información a los delincuentes.
Reconoce con ello la necesidad de darle seguimiento a los expolicías, en especial cuando llegan a salir de la cárcel tras purgar una sentencia o estar acusados de secuestro.
“Es necesario darle seguimiento, sobre todo a los policías que han estado en el área de secuestro para saber porque tienen capacitación en esta área específica, y sería muy importante darles este seguimiento para ver en qué están trabajando, qué están haciendo una vez que dejan de pertenecer a las corporaciones policiacas”.
En el último año hasta 25 policías y expolicías de los tres niveles de gobierno han sido detenidos por la Fiscalía General de Justicia del Estado de México, por su relación con los delitos de extorsión y secuestro.
De estos 13 eran policías municipales, siete estatales y tres policías federales, además de dos de otras entidades, como muestra de la gravedad del problema en lo que va del año, tres policías se han detenido, uno municipal, uno estatal y un federal, en 2017 la cifra llegó a 22.
