Choferes mejor dejan la chamba que transitar en el oriente mexiquense
*Melchor García*
En la zona oriente del Estado de México, el delito de robo a operadores de transporte público y carga persiste como una preocupación grave para el sector.
De acuerdo Gonzalo Hernández, empresario transportista y comerciante, la situación ha alcanzado niveles críticos, provocando que muchos operadores prefieran abandonar su trabajo antes que exponerse al riesgo de robos.
“Hay muchos operadores que ya no quieren seguir trabajando por los robos. Dicen que trabajan todo el día y al llegar la noche les roban. Se llevan el fruto de todo un día de trabajo y se preguntan cómo van a alimentar a sus familias”, lamentó Hernández.
En el caso del transporte de carga, Hernández mencionó que han aumentado las medidas de seguridad que deben implementar para enfrentar los robos. Esto incluye la contratación de seguridad adicional, establecimiento de horarios específicos de tránsito y estrategias como viajar en caravana y mantener comunicación constante para reducir el riesgo.
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En cuanto al transporte colectivo, señaló que no existen horarios específicos de riesgo, ya que los robos pueden ocurrir en cualquier momento del día.
“Durante toda la jornada pueden surgir robos. Hay puntos específicos donde los operadores sabemos que el riesgo es mayor, por lo que evitamos detenernos en esas zonas”, explicó.
Los choferes, añadió Hernández, deben estar constantemente alerta respecto a quién solicita parada: “Aunque suene desafortunado, ya identificamos ciertos perfiles y evitamos hacer paradas que nos parezcan sospechosas“, afirmó.
Este incremento en los robos ha obligado a los transportistas a adaptar sus operaciones diarias y a buscar soluciones adicionales para proteger tanto a sus operadores como a la mercancía que transportan.
