Comuneros temen por presuntas amenazas ante su resistencia sobre el Tren México-Toluca
*Alberto Dzib*
Los comuneros de San Jerónimo Acazulco, Ocoyoacac, que exigieron este miércoles la suspensión de la obra del Tren Interurbano México-Toluca por daños al ambiente, manifestaron ante un “secreto a voces” que apunta a una posible amenaza de muerte contra el líder de los ejidatarios y su representante legal.
Apenas un día después de que los comuneros difundieron su queja por la violación de la empresa constructora y el gobierno federal al amparo con el que se ordena la suspensión de la obra, señalaron que gente cercana a los responsables del proyecto advirtieron que, pese al mandato federal, los trabajos continuarán y ello se logrará con apoyo del gobierno estatal a partir del uso de la fuerza o con la desaparición de las personas señaladas.
Benito Peña, comunero de Acazulco, aseveró que en concreto se refirieron a Marcelino Narváez y a Santiago Pérez Alvarado, presidente de la comisión de Bienes Ejidales de la región y el representante legal de los afectados respectivamente, y pese a tratarse aparentemente de un rumor se teme que las amenazas se cumplan y se intente erradicar la resistencia de los comuneros.
“O sea que hay dos vías de entrar, iban a violar la suspensión o tronando al comisariado y al asesor o por la fuerza pública”.
De acuerdo con el asesor legal de la comunidad, Santiago Pérez, hasta el momento no se ha interpuesto una denuncia formal por el hecho, debido a que no existen elementos que sustenten la queja, aunque se buscará constituir pruebas que den cuenta de las amenazas y se dé protección a los señalados y a los mil 300 comuneros.
Por el momento los ejidatarios de San Jerónimo Acazulco mantienen dos campamentos sobre la obra del tren interurbano con 100 personas cada uno para evitar que se continúe con la construcción, que sostienen, afecta gravemente los mantos acuíferos de la región, flora y fauna, ya que el proyecto original fue desviado y se emprendieron procedimientos irregulares.
