Desde las Alturas
*Arturo Albíter*
- Todo apunta a que la administración de la Ciudad de México no aguantará la presión de los empresarios y personal del sector restaurantero.
- Es muy probable que con medidas extremas de sanidad abran de nueva cuenta el próximo lunes aunque no cambiará el semáforo epidemiológico rojo. Si eso ocurre, en el Estado de México pasará exactamente lo mismo.
- Preguntas del día: Si abren restaurantes la Ciudad de México y el Estado de México al mismo tiempo ¿Es política coordinada?, ¿Es política espejo del Gobierno mexiquense?, ¿La jefa de Gobierno de la Ciudad de México toma decisiones por ambas entidades?
- Comentario del día: Mientras organismos internacionales esperan un crecimiento máximo de la economía mexicana de 3.7%, el Gobierno federal supone que será de 6%.
La estrategia que han operado en el sector salud en contra de la pandemia de COVID-19 ha sido muy criticada, el número de contagiados y fallecidos aumenta cada día sin que se note control alguno, y si las acciones de este tipo son cuestionadas, en el tema económico no es menor la molestia y la inconformidad, que se han sumado a la incertidumbre.
Durante el primer confinamiento población, especialistas y empresarios dieron un voto de confianza a la decisión que tomó el gobierno federal a pesar de que México fue de los pocos países en el mundo donde el sector económico prácticamente no recibió ningún tipo de apoyo para salir adelante, en cambio exigió el pago de impuestos y servicios.
Pero conforme ha pasado el tiempo, la situación ha cambiado, en algunos aspectos hasta radicalmente, y peor cuando las entidades que aportan más del 25 por ciento del Producto Interno Bruto del país se vieron en la necesidad de regresar el semáforo epidemiológico a rojo.
Desde la semana pasada hemos comentado esta situación, que si bien, por un lado, el tema de salud se ha complicado terriblemente, por otro, los gobiernos de ambas entidades optaron por sacrificar actividades no esenciales afectando la economía de miles de empresarios y planta productiva.
Desde la semana pasada, líderes de diferentes organizaciones empezaron a presionar para que les permitieran abrir sus establecimientos porque de lo contrario perderían millones de pesos y miles de empleos.
Las condiciones sanitarias no lo permitieron y en ambos territorios mantuvieron la restricción para que abrieran, especialmente el sector de alimentos.
Pero los empresarios y trabajadores ya no están dispuestos a sacrificarse, porque mientras a ellos, las autoridades los tienen bajo vigilancia, a los ambulantes les permiten operan libremente y es evidente que en esos lugares no se tienen medidas de seguridad, ni higiene.
Cuando se dio la primera manifestación tanto en la Ciudad de México como en el Estado de México, los representantes de la administración estatal abrieron “mesas de trabajo” para “lograr una reapertura gradual y segura”.
Pero no se comprometieron a que las cosas cambiaran el 18 de enero, porque ya habían fallado con reabrir el 11 del mismo mes.
TRASCIENDE QUE LA CIUDAD DE MÉXICO PERMITIRÍA QUE OPERARAN RESTAURANTES DESDE EL LUNES.
Las cosas en la Ciudad de México están que arden, la inconformidad de los integrantes del sector restaurantero, sumado al siniestro en el Metro que dejó fuera de circulación las líneas 1, 2, y 3 tienen a la autoridad capitalina contra la pared.
Así que ha trascendido en diferentes medios y foros que la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum ya dio la orden de negociar con la industria restaurantera un programa de apertura gradual que empezará a operar desde la próxima semana.
Habrá medidas sanitarias estrictas, aforos controlados y aunque todavía se mantenga el semáforo rojo los establecimientos podrán abrir sus puertas.
En el Estado de México la situación no es diferente, si bien el Gobierno no se ha complicado ya que prefieren el silencio y sólo hacen anuncios, la presión es mucha y las reuniones semanales con líderes empresarios no cambian.
Y es que si los de la industria restaurantera están en crisis, en el comercio y servicios la situación no es diferente, el presidente de Canaco dio a conocer un boletín donde informa que en las últimas dos semanas de diciembre se perdieron ventas por 23 mil 144 millones de pesos, a lo que se le tiene que sumar el de Día de Reyes.
De igual forma exigieron que se implementaran estrategias efectivas para controlar la pandemia, de lo contrario el cierre de negocios se incrementará.
Aunque es un hecho que si la Ciudad de México permite la apertura de negocios, la misma línea será anunciada en tierras mexiquenses.
Esto nos lleva a…
LA PREGUNTAS DEL DÍA: SI ABREN LOS RESTAURANTES DE LA CIUDAD DE MÉXICO Y EL ESTADO DE MÉXICO AL MISMO TIEMPO ¿ES UNA POLÍTICA COORDINADA DE SALUD? ¿ES POLÍTICA ESPEJO DEL GOBIERNO MEXIQUENSE? ¿LA JEFA DE GOBIERNO TOMA DECISIONES POR LAS DOS ENTIDADES?
COMENTARIO DEL DÍA: MIENTRAS CALIFICADORAS INTERNACIONALES ESPERAN UN CRECIMIENTO EN MÉXICO DE HASTA EL 3.7%, EL GOBIERNO FEDERAL AFIRMA QUE SERÁ DEL 6%
Mientras calificadoras como Moody´s, el Banco Mundial y Bank of América estiman que la economía en México va a crecer entre el 3 y 3.7 por ciento, en la Secretaría de Economía afirman que será hasta del 6 por ciento, lo que marca una diferencia importante.
El Banco Mundial por ejemplo tiene contemplado que en el 2021 el PIB caerá 9.9 por ciento y crecerá 3.7 por ciento en el 2021 y volverá a bajar en el 2022 a 2.6%, es insuficiente para recuperar lo que se perdió el año pasado.
Moody´s estima por su parte que la recuperación en México se dará hasta el 2023 y que la austeridad fiscal del gobierno de México es un factor de riesgo en tiempos de pandemia.
El Fondo Monetario Internacional por su parte considera que a la economía mexicana le tomará cinco años recuperarse y volver por lo menos a niveles pre-pandemia.
Bank of América considera que el PIB en México para el 2021 será de 3% luego de una caída de 8.5% el año pasado, aunque esto se lograría sólo si el gobierno federal da certidumbre a la inversión, algo que hasta ahora no ha hecho.
Mientras tanto en la Secretaría de Economía de la federación afirman que tras una caída de 9% en el 2020, para este año el PIB crecería más del 6%.
En septiembre la Secretaría de Hacienda consideró que en el 2021 el crecimiento sería de 4.6%
La diferencia de datos oficiales y de organismos internacionales es considerable. Por lo pronto se vive un inicio de año lleno de incertidumbre.