FGR determina que Aburto no fue víctima de tortura; asesino de Colosio
*Redacción Diario Evolución*
La Fiscalía General de la República (FGR) informó que no procederá de manera legal contra ninguna persona señalada de cometer actos de tortura en contra de Mario Aburto, asesino confeso del candidato a la presidencia de la República por el PRI, Luis Donaldo Colosio Murrieta en Lomas Taurinas.
Dentro de los documentos entregados por la FGR, se menciona que en la investigación no se encontraron pruebas respecto a que algún político o servidor público haya torturado el 23 de marzo de 1994 a Mario Aburto, después de ser detenido por el asesinato del candidato Luis Donaldo Colosio.
Además, señaló que desde que trasladaron al asesino confeso de Colosio de Tijuana hacia el Penal del Altiplano, “no se logra acreditar que los servidores públicos hayan realizado una acción dolosa, tendiente a infligir dolores o sufrimientos graves ni físicos ni psíquicos a Mario Aburto Martínez”, afirmó.
También SE menciona que “debido a la impugnación realizada por Aburto el caso aún no se cerrará”, por lo cual, este sujeto aún puede solicitar un amparo si la institución emite un nuevo acuerdo similar al que notificó en noviembre pasado; resolución que fue revelada por la periodista Laura Sánchez Ley.
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Asimismo, se reveló que el pasado 28 de noviembre de 2023, los integrantes de la Fiscalía Especializada en Materia de Derechos Humanos (FEMDH) agendó visitar a Mario Aburto al Cefereso número 12 en Ocampo, Guanajuato, para notificar la conclusión, pero se negó a aceptarla.
Este sujeto fue condenado a solo 45 años de prisión, pero un tribunal colegiado canceló la sentencia luego de que Aburto Martínez cumplió 29 años de prisión, situación que incluso lo dejaría en libertad este próximo mes de marzo
En cuanto a los hechos ocurridos donde falleció Colosio, la versión oficial indica que Aburto disparó contra el entonces candidato priista tras su acto de campaña, el 23 de marzo de 1994, en la colonia de Lomas Taurinas.
Fue juzgado por estos hechos dos días después, bajo el cargo de homicidio calificado con premeditación, ventaja y alevosía, así como por la portación de arma de fuego sin licencia. Fue hasta octubre de 2004 que recibió una sentencia de 48 años de prisión, redujo a 45 años luego de varios amparos.
G.L.
