Joven entre la vida y la muerte al ser baleado por el Ejército en Tamaulipas
*Redacción Diario Evolución*
En medio de un enfrentamiento entre un grupo armado y elementos del Ejército Mexicano en Nuevo Laredo, Tamaulipas el 17 de agosto, un joven de 16 años fue herido de gravedad mientras realizaba trabajos de limpieza y lo alcanzaron las balas que le dañaron el sistema digestivo. Actualmente se encuentra debatiéndose entre la vida y la muerte en un hospital privado debido a que el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) le negó la atención.
El hecho ha llamado la atención de la ONU-DH, que al conocer la queja de sus familiares acerca de los altos costos en el hospital privado por la falta de atención médica en el sector salud, llamó a las autoridades competentes a realizar una investigación exhaustiva, imparcial e independiente que garantice el esclarecimiento de los hechos y la debida atención al joven.
De acuerdo con informes, el estudiante de bachillerato identificado como Armando H.G. quedó atrapado en medio de una persecución entre personal del Ejército Mexicano y ocupantes de una camioneta en el cruce de la Carretera Aeropuerto y Héroe de Nacataz, en Nuevo Laredo. Las balas de la persecución alcanzaron al joven mientras se encontraba laborando con dos amigos.
Diario Evolución te recomienda:
Una de sus compañeras, al verlo herido con el abdomen expuesto, intentó cubrirlo y llamó a sus familiares y servicios de emergencia. La madre del menor, al enterarse de los hechos, fue por su hijo y lo llevó a la Unidad de Medicina Familiar 76 del IMSS.
Fue aquí donde comenzó el calvario para que fuera atendido, puesto que le dijeron que no contaban con personal médico especializado y le sugirieron llevarlo a otra unidad médica, ubicada en el centro. Cuando llegaron al Hospital General de la Zona Número 11 del IMSS, le dijeron que no lo atenderían porque no estaba vigente su cartilla de derechohabiente como estudiante.
Después de una larga agonía entre buscar un hospital que lo atendiera, Armando fue ingresado la madrugada del 18 de agosto en un particular donde permanece en el área de cuidados intensivos, debatiéndose entre la vida y la muerte por el daño que recibió en sus intestinos.
Debido a los altos costos, la familia pide ayuda, con el Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo, a las autoridades y a la SEDENA para que se hagan cargo de los gastos médicos del menor hasta que se recupere.
A.C.
