Llaman a dar un giro de 180 grados
*Melchor García*
La crisis económica que ha desatado el COVID-19, ha pegado y duro en los bolsillos de todas las familias. El día de hoy la hora de la comida no es como antes, la cifra de familias que no saben si quiera si habrá alimentos en sus mesas, crece cada día.
Pese a ello no todas las consecuencias son fatales, hay quienes buscan darle un giro de 180 grados a las adversidades y así, aliviar la preocupación de quienes hoy padecen hambre.
Jorge Antonio Trujano Ramírez, representante del Restaurante María Curandera, ubicado en Metepec, refiere que, si bien las bajas ventas han afectado al lugar por la imposibilidad de trabajar, también han incrementado las ganas de ayudar, no sólo con un gesto solidario, sino buscando dar un giro de 180 grados a los problemas que se nos avecinan.
“En pláticas con el staff, con toda la familia de María Curandera, como bien lo dices son momentos difíciles y de ahí surgió la idea de regresar un poco a la gente y a los sectores más vulnerables parte de lo que la vida nos da y es la forma de agradecerlo por parte del restaurante.”, señalaron.
La campaña que han iniciado en medio de la emergencia es “María 180” que tiene el objetivo de dar 180 comidas gratis todos los días, al menos durante el próximo mes para darle un vuelco a la realidad de muchos: “La idea es dar 180 comidas en el municipio de Metepec, así fue como comenzó para dar un giro de 180º y ver la situación que estamos viviendo desde un polo opuesto, gracias a la ayuda de más gente hemos logrado sumar ese número de comidas, ahorita estamos repartiendo alrededor de 300 comidas.”, comunico el staff de María Curandera.
La caravana de apoyo comienza a tener éxito entre los necesitados como aquellos que se quieren sumar por lo que a partir del lunes llegará Huixquilucan y a San mateo Atenco con 100 comidas dos veces a la semana, hoy invitando a las familias y empresarios a sumarse en donaciones y productos en especie para que la ayuda pueda multiplicarse.
En este caso como para conocer las calles y barrios donde se repartirá la comida todos los días las redes sociales del restaurante: “Somos una familia que es la familia de María Curandera, sin embargo, atrás de todo esto está mi familia la de cada una de las personas que están dando su granito y pues ser consientes hacer un cambio de conciencia con este paro económico que tenemos con esta contingencia sanitaria los invistamos a sumar.”.
Hoy, María Curandera sabe que combatir el hambre con amor es necesario en una época en la que no se puede dar la mano sin miedo al coronavirus humano, pero siempre se puede compartir un plato de comida.