OSFEM: Un elefante blanco
En los próximos días el Órgano Superior de Fiscalización del Estado de México (OSFEM) tendrá un nuevo titular, hay 27 aspirantes que ya fueron entrevistados, la persona que sea elegida tiene el reto de convencer a los diputados de que le proporcionen las herramientas necesarias para castigar a quienes abusan del presupuesto o hacen mal manejo del dinero de los mexicanos y mexiquenses.
Es un secreto a voces la corrupción que hay dentro de los ayuntamientos, aquí en diarioevolucion.com.mx hemos dado cuenta de algunos casos, destacando el de la directora de Fiscalización del Ayuntamiento de Toluca, quien alteraba el aforo de Teatro Morelos en detrimento de las arcas municipales, se sabe que a la fecha fue despedida, pero no hay indicios de que le hayan fincado responsabilidades a pesar de las denuncias realizadas ante el OSFEM.
Muchos medios han dado cuenta de otros casos, la realidad es que bajo el argumento de la secrecía de las investigaciones, el órgano no informa de las conclusiones a La Mayoría Silenciosa, solo a la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado de México, quien juzga y castiga a su parecer.
Platicando con personas cercanas a las tesorerías municipales, admiten que desviar recursos de las arcas municipales es muy sencillo, comprobar gastos también, no se diga justificar recursos en programas o gastar dinero en proyectos y presupuesto para obras.
En las cuentas públicas del 2023 se encontraron 2 mil 916 observaciones, de las cuales 2 mil 32 pertenecen a municipios y 884 al estado. Los municipios más observados son: El Oro, Ecatepec, Lerma, La Paz, Huixquilucan, Coacalco, San Mateo Atenco y Tenancingo, y los sistemas municipales para el Desarrollo Integral de la Familia de Toluca y Ecatepec, entre otros.
En cuanto a las dependencias estatales el mayor número de observaciones fueron la Coordinación General de Comunicación Social del gobierno estatal, el Hospital Regional de Zumpango, las secretarías de Desarrollo Económico y de las Mujeres, la Comisión de Agua del Estado de México, la Junta de Caminos y el Fideicomiso para el Desarrollo de Parques y Zonas Industriales del Estado de México, así como el Poder Judicial.
Y así ha sido a lo largo de varios años, lo que resulta inaudito es que a la fecha nadie haya sido sentenciado o castigado por el desvío o mala aplicación de los recursos y muchos expresidentes municipales se placean por varios países y se dan la gran vida, cuando es notorio que con su sueldo de los tres años no les alcanzaría para tener ese estilo de vida.
Por ello, cobra relevancia la versión de que el OSFEM le ayuda a los municipios a solventar sus observaciones a cambio de un pago millonario, el cual debe ser en efectivo y en algunos casos a través de despachos contables que ellos recomiendan. Bien haría la Junta de Coordinación Política en hacer una investigación de los hechos.
Los legisladores deben dejar la simulación a un lado. Si quieren acabar con la corrupción, es necesario castigar a quienes hacen mal uso de los recursos públicos, sin importar el partido al que pertenezcan o las negociaciones que tengan con los presidentes municipales.
Los requisitos para ser titular del OSFEM no son cosa del otro mundo: tener experiencia y poseer título profesional, cosas básicas, además de algunos candados para quienes han ocupado otros cargos. Los aspirantes deben poseer título y cédula profesional en las licenciaturas de Contaduría Pública, Derecho, Economía, Administración Pública, Administración de Empresas o cualquier otra relacionada con las actividades de contraloría, transparencia o rendición de cuentas, con una experiencia mínima de cinco años.
Para que proceda el registro, las personas interesadas deberán acreditar experiencia (de por lo menos cinco años) en materia de control, auditoría financiera y evaluación; gozar de buena reputación; no haber sido condenadas por sentencia ejecutoriada por delitos dolosos, y no haber sido destituidas o inhabilitadas para ocupar cargo público, o como resultado de un procedimiento administrativo cuya resolución haya quedado firme.
Así las cosas, veremos si Morena tiene el interés de darle un vuelco a la fiscalización en el Estado de México o seguirá ofreciendo pan con lo mismo a La Mayoría Silenciosa, tiene una oportunidad increíble para disminuir la corrupción en el estado, los municipios y los organismos autónomos.