Pipa con 32 mil litros de aceite asfáltico sufre aparatosa volcadura, en Xonacatlán
José Ángel Gutiérrez López.
Un tráiler pipa cargado con aceite para asfalto sufrió una aparatosa volcadura en la colonia Emiliano Zapata, perteneciente al municipio de Xonacatlán, donde la pesada unidad se precipitó a un río y generó movilización policiaca, así como una alerta inicial de evacuación.
Los hechos se reportaron al filo de las 06:00 de la mañana en la intersección de la calle Oriente Uno esquina con carretera Amomolulco-Ixtlahuaca, cerca de la federal Toluca-Naucalpan, tras un llamado a los cuerpos policiacos sobre un tráiler volcado en las aguas del río Zolotepec.
Elementos de Seguridad Pública Municipal de Xonacatlán arribaron el sitio para comenzar el acordonamiento de la zona, en conjunto con personal de la nueva Secretaría de Seguridad mexiquense, quienes quedaron atentos del arribo de los servicios de atención prehospitalaria.
Derivado de un posible derrame de “combustible” sonaron alertas para evacuar la zona, sin embargo no fue necesario porque el personal especializado notificó que los cerca de 32 mil litros del material transportado no representaban peligro de incendio o explosión.
A pesar de lo aparatoso de la escena, la volcadura no arrojó saldo de personas lesionadas, salvo al conductor, un hombre de 40 años de edad, que fue atendido en el lugar por contusiones leves y crisis nerviosa.
El percance generó una intensa movilización, ya que tanto el personal policiaco como el de servicios de emergencia trabajaron desde la hora del reporte para extraer la pipa, perteneciente a la empresa de razón social “Tada” con placas de circulación 789EV1.
El percance sobrevino cuando el conductor de la unidad hizo la maniobra para dar vuelta desde la Amomolulco-Ixtlahuaca hacia la calle Oriente Uno de la colonia Zapata, en el límite con colonia 5 de mayo, donde debido a la falta de pericia perdió el control y cayó de su costado derecho.
El peso, aunado a la falta de pericia del chofer, derivó en las inevitables volcadura y caída al afluente por cerca de tres metros de altura, provocando un estruendo de metales que causaron la salida de los lugares de sus hogares.
La circulación se mantuvo trastornada en ese tramo, hasta que cerca de las 12.00 horas, trabajadores del servicio de grúas extrajeron el tractocamión de la unidad, mientras que homólogos de la empresa hacían el traslado del líquido a un tráiler distinto.
El conductor de la unidad fue trasladado por elementos municipales ante el juez calificador-conciliador, con el propósito de deslindar responsabilidades.