Seguridad económica, principal vulnerabilidad en la vejez
Es importante brindar seguridad económica durante la vejez para garantizar el cuidado de la salud y la vivienda, así como brindar una mayor autonomía y bienes de consumo en este tramo de la vida, aseguró Isalia Nava Bolaños, especialista del Instituto de Investigaciones Económica de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), en el marco del Seminario Permanente de Género, Violencia y Políticas Públicas de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx).
En redes sociales de la Máxima Casa de Estudios mexiquense explicó que la seguridad económica es la capacidad de que disponen las personas para adquirir de forma independiente de una cantidad de recursos económicos que van a tener ciertas particularidades, una de ellas es que tienen que ser recibidos de manera regular y que sean suficientes para garantizar una buena calidad de vida y atender las necesidades que se presenten a lo largo de la vida.
En el caso particular de la vejez o edad avanzada se llega a un momento en la vida en el cual ya no se pueden obtener esos ingresos de manera regular o tradicional, por lo tanto, se necesitan ocupar otro tipo de mecanismos para poder satisfacer necesidades básicas como la vivienda y la salud.
Nava Bolaños explicó que durante la vejez existen ciertas desigualdades económicas en torno al género que parten desde la niñez y que se van acumulan a lo largo de la vida. Una de estas desigualdades es en la educación, siendo que las mujeres no siempre pueden acceder a ella, dándole a los varones una mayor participación en actividades económicas.
En este sentido, mencionó que es importante hablar de estas desigualdades de género vinculadas con la economía, ya que dentro del mercado laboral, el trabajo de las mujeres se han invisibilizado, debido a que realizan trabajos de cuidado y domésticos, lo cual también es importante para la sostenibilidad de la vida humana; sin embargo, es invisibilizado por desarrollarse en el ámbito de lo privado y sin una retribución económica, mientras que la contribución masculina es mayormente reconocida debido a que se desarrolla en el ámbito de lo público.
La doctora en estudios de población explicó que en México se ha observado un aumento en la población de personas mayores, por ello es necesario garantizar a la población recursos económicos que le permitan gozar de seguridad económica, lo que puede evitar que las personas al entrar a la edad adulta caigan en una situación de pobreza, asegurando el bienestar de la vejez, una buena calidad de vida y subsistir con buenas condiciones económicas, brindándoles una mayor autonomía y bienes de consumo en este tramo de la vida.
Concluyó que para brindar seguridad económica en la vejez es necesario diseñar políticas públicas con acciones e instrumentos relacionados con las pensiones, que establezcan mecanismos de seguridad económica, no solo de cobertura, revisando los montos, pensando las estrategias para cubrir a los sectores de mayor desventaja y que protejan a los grupos que no cuentan con estos apoyos en las edades avanzadas a partir de programas de apoyo gubernamental.