Sheinbaum usará iglesias como centros de acopio de armas; Basílica la gran sede
*Redacción Diario Evolución*
La Basílica de Guadalupe es ahora el principal centro de acopio de armas de manera voluntaria luego de que el gobierno federal de Claudia Sheinbaum anunciara desde sus instalaciones el programa “Si al desarme, sí a la paz”, que busca reducir los índices de delitos.
Sin embargo, no será la única sede, pues dicho programa usará iglesias en su mayoría de la religión católica, situadas en regiones violentas del país, para que las y los ciudadanos canjeen sus armas de fuego de manera voluntaria y reciban hasta 26 mil pesos.
El programa también intercambiará juguetes bélicos de los niños por otros que no aludan a la violencia; además, se informó que no se hará investigación a nadie de las personas que entreguen dichas armas, y a su vez se anunció que todas las que se recolecten serán destruidas.
También los funcionarios realizarán jornadas en iglesias católicas y evangélicas, además de otras religiones, así como brigadas “calle por calle” y “casa por casa”, expuso Rosa Icela Rodríguez, titular de la Secretaría de Gobernación (Segob), encargada del plan, para que se dé a conocer dicho programa.
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“Al personal de la Secretaría de la Defensa Nacional es a quien le toca recibir y destruir al momento rifles, escopetas, pistolas, revólveres, lanzamisiles, granadas y todo tipo de armas. A cambio, se entregará dinero en efectivo con base en un tabulador publicado en el Diario Oficial”, detalló.
Por otra parte, Sheinbaum anunció que su propósito es que “ninguna familia tenga un arma” en México, donde cada año entran 200 mil armas de Estados Unidos, origen de casi tres cuartas partes, el 74 por ciento, de las que incautan las autoridades mexicanas.
En redes sociales esta acción genero varias reacciones, unos están a favor de dicho proyecto, pero otros sostienen que este programa debería haber sido llevado primero a los estados donde impera la violencia; y otros tantos critican que la presidenta solo este usando la religión como medio populista.
G.L.
