VIVA LA FAMILIA

Por Alfonso Bravo

El pasado sábado 10 de septiembre salimos a marchar más de un millón de mexicanos en 119 ciudades del país, una manifestación histórica ya que en este caso los que la conformaron fueron niños, niñas, jóvenes, adultos mayores, mujeres y hombres que acudieron en paz, de forma libre y respetuosa, una gran diferencia con las marchas de la CNTE, los normalistas o sin fin de organizaciones con fines políticos y económicos.

La clara petición de estas marchas es el pedir al Gobierno el respeto a la institución del matrimonio como la unión de hombre y mujer, así como del derecho de los padres a educar a sus hijos.

Algunos dicen que es una acción en contra de los llamados matrimonios entre personas del mismo sexo, que provoca odio y rechazo a quienes tienen esa preferencia sexual, aseveración totalmente equivocada.

En el derecho a los diversos tipos de relaciones contractuales se les denomina diferente en torno a sus objetivos, así cuando una persona va a rentar un inmueble a otra se le denomina arrendamiento y cuando se lo presta sin recibir renta a cambio se le denomina comodato, sin que exista discriminación alguna por la diferencia en el nombre del contrato.

Así es que se pide el respeto al matrimonio como base de convivencia entre hombre y mujer que tiene no sólo el objetivo de demostrarse amor, sino también de que ese amor dé como fruto a los hijos, el Estado debe de velar por los derechos civiles de quienes quieren unir su vida a una persona de su mismo sexo argumentando el amor, por supuesto, pero sin alterar la figura del matrimonio.

Las marchas del sábado también piden se respete el derecho de los padres a determinar la educación de sus hijos, al Estado toca la instrucción en cuanto a las ciencias y técnicas pero es a los padres a quienes corresponde formación en torno a los principios y valores de sus hijos, de esa forma hay quien transmite el humanismo como forma de vida y hay quien prefiere inculcar el socialismo. La iniciativa del primer mandatario Peña Nieto pretende quitar ese derecho a los padres.

Seguramente seguirá el debate sobre el tema que les comparto, sin embargo para mí es un motivo de alegría el saber que como yo hay más de un millón de mexicanos dispuestos a hacer valer su voz cuando los gobernantes atacan a sus familias, por eso hoy como muchos mi grito es VIVA LA FAMILIA!!!

¿Qué nos dejó la semana? La llegada de Luis Miranda a la Secretaría de Desarrollo Social, un hombre que no sabe del tema pero si de comprar votos y condicionar programas sociales, Peña Nieto insiste en pasar a la historia como el presidente menos querido.

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